Era pequeña, tendría unos ocho años y una mirada llena de alegría e inteligencia, se paseaba junto a nosotros intentando vender algunos de los collares de orquídeas que colgaban de su pequeño y menudo brazo…
…no paró hasta que nos colgó uno al cuello, era encantadora…y lo sabía. Observé que le habíamos caído bien y quería estar un rato con nosotros así que, para alargar la situación, se lo puse difícil diciéndole que solo le compraría uno…
…entonces sacó un bolígrafo y dibujó en la palma de su mano una cuadrícula para jugar al “tres en raya” mientras me decía en perfecto inglés: “si tu ganas compras uno, si yo gano me compras dos”. En ese momento ya todas las personas que estaban en aquel bar de playa nos rodeaban expectantes ante el insólito desafío de la niña…tenía que jugar!!!
Comenzamos el juego y, por supuesto, me ganó!!!...sonaron los aplausos, su carita se iluminó con una gran sonrisa y realicé esta fotografía. Pensaba, desde el principio, comprarle todos los collares para que se fuese a casa…pero solo pude comprar los dos nuestros ya que, inmediatamente, el resto de personas le compraron los demás.
Un matrimonio australiano que habían presenciado la escena, mayores y muy agradables, me dijeron: “te llevas una buena foto pero, sobre todo, una bonita historia para contar”.
Y aquí está esta historia que, como no podía ser de otra manera, quería compartir con mis amables seguidores, ustedes…muchas gracias y un gran abrazo, amig@s!!! ;)
La história es magnífica Ignacio, peró la foto es extraordinária y llena de ternura. Esos ojos pequeños de la niña, delatan su inteligéncia, la picardia y la simpatia necesária para sobrevivir y vender sus collares a los turistas. Me encanta! Un abrazo
Sus ojos reflejan esa inocencia que todo niño/a posee y que con un click lo has resuelto de manera que puedes sentirte orgulloso de llevarte a casa un bello retrato lleno de espontaneidad y naturalidad Ignacio, un abrazo compi.
Una sonrisa preciosa y una historía más bonita todavía, esta pequeña me recuerda a mi queridídima nieta filipina de 3 años pues tienen los mismos rasgos en la cara . Saludos
Pues sí Ignacio, una maravillosa historia y además muy bien relatada, efectivamente la mirada de la niña es espectacular y dulce, bonita imagen si señor, felicidades. Un abrazo.
Un retrato increible, la sonrisa de la niña transmite felicidad por haber ganado y nada mas verla yo tambien he sonreido. Una historia muy bonita , que queda reflejada en una foto muy representativa. Un saludo Ignacio. Parisina.
Me alegro mucho que la hayas compartido con nosotros amigo Ignacio. La niña te puso en un divertido compromiso y lo llevaste genial. La foto te ha quedado magnifica con esa sonrisa que seguro tardarás en olvidar. Pue eso,que pases un buen verano, crak!!!!!!
Hola Ignacio.Con tantas bellas fotos difícil de eligir donde dejar mi comentario...Pero me quedo aquí con esta maravillosa sonrisa :) Buen fin de semana y un fuerte abrazo :)
Preciosa historia.... me ha encantado esta niña, su sonrisa que también has fotografiado, su forma de vender y relacionarse, me parece una niña especial....... el matrimonio Australiano no se equivoca en nada, eres grande Ignacio, hiciste dos cosas buenas... la foto y un momento que jamas olvidaras... no es para menos, sensacional amigo.
Bonita historia Ignacio, muy simpática! la foto es fantástica tanto por la técnica como por la sonrisa de la niña y su composición. Un fuerte abrazo :)
Pues es cierto. La foto es magnifica, no podía ser de otro modo habiendo nacido en tu mirada, pero la historia es toda pura simpatía e inteligencia. Uno de esos instantes que no se olvidan. Un abrazo Ignació, vuelvo a la actividad.
Muchísimas gracias a tod@s por su amabilidad, amigos...intentaré seguir mejorando y a ver si soy capaz de compartir fotografias de paisajes y escenas...no tantos retratos!!! ;)
Aunque conocía la historia, al transmitirla a través del retrato, resulta aún más encantadora, pues esa preciosa carita sonriente, también plasmada por tu cámara, te acerca aún más a ella, a la historia de una niña que tan pequeña se sabe y se tiene ganar la vida.
¡¡Guauuuuuuuuuuuuuu, qué sonrisa más linda!! Preciosa la carita de alegría que tiene la niña. Esa sonrisa no tiene precio. Y esos ojos tan vivos y picaros, lo dicen todo. Muy bella la historia. Hay niños que si no trabajan no pueden llevar dinero a sus casas para comer. Es una pena pero es la realidad de muchos niños/as. Debería de estar en la escuela, pero la vida les ha privado de ella. No la vida, los gobiernos que gobiernan en esos países. Me alegro por la niña que pudiera terminar pronto ese día su trabajo. Una foto de concurso. Preciosaaaaaaaa me ha encantado, al mirarla como que todos los problemas se esfuman. Gracias por compartirla porque es una foto tan fresca y llena de vida que hace que una ponga los pies en la tierra y se de cuenta de que es afortunada por la vida que nos ha tocado vivir. Saludos y un gran abrazo
La historia me parece muy impresionante pero el retrato es para quitarse el sombrero, IMPRESIONANTE como transmite la felicidad y sinceridad de la niña. Muy bien captado y muy oportuno. Saludos i gracias por compartir. Cuida´t !!
Una anécdota preciosa, Ignacio, para atesorarla. La foto es genial, los ojos se salen de expresividad y alegría. Qué bonita niña, y qué lista. Lástima que tenga que andar vendiendo esos collares para sobrevivir cuando a otros (nos) sobra tanto. Una historia y foto muy humanas, me gusta mucho, amigo. Gracias por compartirla con nosotros, lo has relatado muy bien.
Una historia preciosa. Una mirada arrebatadora. Y esa sonrisa que seguro la llevas aún por ahí guardada al pensar en la niña. Precioso todo, Ignacio. Una foto con historia.
Hola Ignacio, no sé que ha pasado pero me ha salido error al enviarte el comentario así que intento repetirlo. Decirte que acabo de ver las últimas fotos que me he perdido estos dias y que para variar me han encantado y esta en particular por su historia me ha gustado mucho, además de la preciosa foto de la niña en particular. Son preciosas todas, de la primera a la última que he visto y con un encanto especial. Un abrazo y que pases una buena semana.
Podría darme envidia, la magnifica foto que has conseguido, es esplendida. Pero no, me da envidia y mucha esas historias que cuentas y que son momentos tan especiales con otro ser humano. Enhorabuena Ignacio por las dos, y espero sigas viviendo grandes momentos y compartiendo los que te parezca. Un beso PD. Gracias por pasarte y decirme.......Tienes razón, están mejor abiertos y no hay que agobiarse...........
La foto es preciosa, la sonrisa y la luz de los ojos llenan toda la imagen. Está claro que bien se merecía la foto y que todos se llevaran de recuerdo los collares y, por su puesto, una gran y tierna historia...
Joe...y tanto Ignacio..y tanto...hay momentos únicos, que en la moviola de nuestra vida aparecen...éste sin duda será uno...y quedará en la retina de muchos, los que lo vivieron y la de los que podemos disfrutar de ello gracias a tu fotografía...que por cierto tiene una fuerza inmensa...es un auténtico FOTÓN...ES MÁGICA... muy MÁGICA...
FELICIDADES MUCHACHITO...HAZLE LLEGAR LA FOTO ( TODO ES POSIBLE :-))
ABRAZOTES y buena semanita...yo ya casi de vacacionesssssssss...no me lo creooooooooooooo :-)
Hoy hace un día horrible, estoy tirada en la cama y no sé cómo llegué a tu blog pero me puse a verlo, entonces llegué a esta entrada…¡Es hermosa en su conjunto! Amé la foto, creo que pocas veces te volverán a sonreír así. Y amé la historia, y que te ganara porque sino no tendríamos esa expresión irrepetible. Un abrazo.
Era pequeña, tendría unos ocho años y una mirada llena de alegría e inteligencia, se paseaba junto a nosotros intentando vender algunos de los collares de orquídeas que colgaban de su pequeño y menudo brazo…
ResponderEliminar…no paró hasta que nos colgó uno al cuello, era encantadora…y lo sabía. Observé que le habíamos caído bien y quería estar un rato con nosotros así que, para alargar la situación, se lo puse difícil diciéndole que solo le compraría uno…
…entonces sacó un bolígrafo y dibujó en la palma de su mano una cuadrícula para jugar al “tres en raya” mientras me decía en perfecto inglés: “si tu ganas compras uno, si yo gano me compras dos”. En ese momento ya todas las personas que estaban en aquel bar de playa nos rodeaban expectantes ante el insólito desafío de la niña…tenía que jugar!!!
Comenzamos el juego y, por supuesto, me ganó!!!...sonaron los aplausos, su carita se iluminó con una gran sonrisa y realicé esta fotografía. Pensaba, desde el principio, comprarle todos los collares para que se fuese a casa…pero solo pude comprar los dos nuestros ya que, inmediatamente, el resto de personas le compraron los demás.
Un matrimonio australiano que habían presenciado la escena, mayores y muy agradables, me dijeron: “te llevas una buena foto pero, sobre todo, una bonita historia para contar”.
Y aquí está esta historia que, como no podía ser de otra manera, quería compartir con mis amables seguidores, ustedes…muchas gracias y un gran abrazo, amig@s!!! ;)
Historias como ésta dan sentido a los viajes, y si de paso consigues buenas fotografías como ésta, supongo que la satisfacción es total.
ResponderEliminarUn abrazo.
Desde luego es una maravillosa historia...y la foto refleja su sonrisa...estupenda amigo..un saludo desde Murcia...
ResponderEliminardesgarradora historia Ignacio, la niñez no siempre es inocente!
ResponderEliminarun saludo de José Miguel del Pino
No tengo claro quién eres, José Miguel...pero agradezco tu comentario y te doy la bienvenida al blog!!!
EliminarGracias y un saludo!!! ;)
La história es magnífica Ignacio, peró la foto es extraordinária y llena de ternura. Esos ojos pequeños de la niña, delatan su inteligéncia, la picardia y la simpatia necesária para sobrevivir y vender sus collares a los turistas.
ResponderEliminarMe encanta!
Un abrazo
ResponderEliminarSus ojos reflejan esa inocencia que todo niño/a posee y que con un click lo has resuelto de manera que puedes sentirte orgulloso de llevarte a casa un bello retrato lleno de espontaneidad y naturalidad Ignacio, un abrazo compi.
Lista,inteligente y muy buena vendeedora... Preciosa foto maestro.. Un saludo :)
ResponderEliminarUn excelente retrato para acompañar esa bonita historia.
ResponderEliminarUn abrazo.
Una sonrisa preciosa y una historía más bonita todavía, esta pequeña me recuerda a mi queridídima nieta filipina de 3 años pues tienen los mismos rasgos en la cara . Saludos
ResponderEliminarPues sí Ignacio, una maravillosa historia y además muy bien relatada, efectivamente la mirada de la niña es espectacular y dulce, bonita imagen si señor, felicidades. Un abrazo.
ResponderEliminarUn retrato increible, la sonrisa de la niña transmite felicidad por haber ganado y nada mas verla yo tambien he sonreido.
ResponderEliminarUna historia muy bonita , que queda reflejada en una foto muy representativa.
Un saludo Ignacio.
Parisina.
she has such a marvellous smile, that I cannot stop looking at her ! gorgeous photo Ignacio !
ResponderEliminarincreíble la fuerza y la alegría con que esta niña emprende ganar su juego y "ganarse" la vida...
ResponderEliminargracias por compartir sonrisas... una vez más!!
Preciosa, si señor, la niña, la foto y la historia, no se puede pedir mas, esta es una de esas anécdotas que recordaras mucho tiempo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Me alegro mucho que la hayas compartido con nosotros amigo Ignacio. La niña te puso en un divertido compromiso y lo llevaste genial. La foto te ha quedado magnifica con esa sonrisa que seguro tardarás en olvidar.
ResponderEliminarPue eso,que pases un buen verano, crak!!!!!!
Hola Ignacio.Con tantas bellas fotos difícil de eligir donde dejar mi comentario...Pero me quedo aquí con esta maravillosa sonrisa :)
ResponderEliminarBuen fin de semana y un fuerte abrazo :)
Que bonita historia! y que buen saber hacer por parte de ambos. Desde luego el matrimonio Australiano tenia toda la razón.
ResponderEliminarSAludos.
Excelente retrato, ademas de que tecnicamente me encanta, esa sonrisa de la chica no tiene precio, un abrazo.
ResponderEliminarPreciosa historia.... me ha encantado esta niña, su sonrisa que también has fotografiado, su forma de vender y relacionarse, me parece una niña especial....... el matrimonio Australiano no se equivoca en nada, eres grande Ignacio, hiciste dos cosas buenas... la foto y un momento que jamas olvidaras... no es para menos, sensacional amigo.
ResponderEliminarUn abrazote
Bonita historia Ignacio, muy simpática! la foto es fantástica tanto por la técnica como por la sonrisa de la niña y su composición.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo :)
Pues es cierto. La foto es magnifica, no podía ser de otro modo habiendo nacido en tu mirada, pero la historia es toda pura simpatía e inteligencia. Uno de esos instantes que no se olvidan.
ResponderEliminarUn abrazo Ignació, vuelvo a la actividad.
Beautiful smile Ignacio :)
ResponderEliminarNo se cual es la historia, pero esa sonrisa bien vale la foto
ResponderEliminarSupongo que te parece muy simple...pero solo soy un aficionado, lo tuyo es mas profesional.
EliminarMuchas gracias por comentar y un abrazo, amigo!!! ;)
Muchísimas gracias a tod@s por su amabilidad, amigos...intentaré seguir mejorando y a ver si soy capaz de compartir fotografias de paisajes y escenas...no tantos retratos!!! ;)
ResponderEliminarMe sumo a Paco, historia, foto, y niña, si señor, un DIEZ.
ResponderEliminarFELICIADES.
Aunque conocía la historia, al transmitirla a través del retrato, resulta aún más encantadora, pues esa preciosa carita sonriente, también plasmada por tu cámara, te acerca aún más a ella, a la historia de una niña que tan pequeña se sabe y se tiene ganar la vida.
ResponderEliminarGracias por compartirla con nosotros.
Enhorabuena y un fuerte abrazo, amigo Ignacio.
¡¡Guauuuuuuuuuuuuuu, qué sonrisa más linda!!
ResponderEliminarPreciosa la carita de alegría que tiene la niña.
Esa sonrisa no tiene precio. Y esos ojos tan vivos y picaros, lo dicen todo.
Muy bella la historia. Hay niños que si no trabajan no pueden llevar dinero a sus casas para comer. Es una pena pero es la realidad de muchos niños/as. Debería de estar en la escuela, pero la vida les ha privado de ella. No la vida, los gobiernos que gobiernan en esos países.
Me alegro por la niña que pudiera terminar pronto ese día su trabajo.
Una foto de concurso. Preciosaaaaaaaa me ha encantado, al mirarla como que todos los problemas se esfuman.
Gracias por compartirla porque es una foto tan fresca y llena de vida que hace que una ponga los pies en la tierra y se de cuenta de que es afortunada por la vida que nos ha tocado vivir.
Saludos y un gran abrazo
Preciosa historia y preciosa foto. Llevaba algún tiempo desconectada y qué sorpresa. Menuda productividad!
ResponderEliminarUn abrazo.
La historia me parece muy impresionante pero el retrato es para quitarse el sombrero, IMPRESIONANTE como transmite la felicidad y sinceridad de la niña. Muy bien captado y muy oportuno.
ResponderEliminarSaludos i gracias por compartir.
Cuida´t !!
Que linda la sonrisa y carita de la niña enseñando la mano con el dibujo.....
ResponderEliminarUna foto e historia entrañables
Un abrazo Ignacio
No solo me deja impresionada esta imagen, sino toda la serie de fotos en blanco y negro que has publicado anteriormente.
ResponderEliminarNada más que por ver la cara de Felicidad de la niña merece la pena de comprarle todos los collares.Su cara de alegría me ha conquistado.
Besos
http://ventanadefoto.blogspot.com.es/
Tierna historia y guapa foto. Ya veo que has visitado Tailandia. Yo la disfruté mucho hace unos años, y tengo ganas de volver.
ResponderEliminarUn abrazo
Una anécdota preciosa, Ignacio, para atesorarla. La foto es genial, los ojos se salen de expresividad y alegría. Qué bonita niña, y qué lista. Lástima que tenga que andar vendiendo esos collares para sobrevivir cuando a otros (nos) sobra tanto. Una historia y foto muy humanas, me gusta mucho, amigo. Gracias por compartirla con nosotros, lo has relatado muy bien.
ResponderEliminarUn beso,
Margarita
We all dream about such portraits, but you did it.
ResponderEliminarGracias Ignacio... Por la preciosa foto y por contarnos la historia, que seguro no olvidarás.
ResponderEliminarBuena semana.
Un beso.
La historia es preciosa, casi tanto como la niña. La foto espectacular; contagia alegría. Un beso, Ignacio
ResponderEliminarUna historia preciosa. Una mirada arrebatadora. Y esa sonrisa que seguro la llevas aún por ahí guardada al pensar en la niña. Precioso todo, Ignacio. Una foto con historia.
ResponderEliminarHola Ignacio, no sé que ha pasado pero me ha salido error al enviarte el comentario así que intento repetirlo. Decirte que acabo de ver las últimas fotos que me he perdido estos dias y que para variar me han encantado y esta en particular por su historia me ha gustado mucho, además de la preciosa foto de la niña en particular. Son preciosas todas, de la primera a la última que he visto y con un encanto especial. Un abrazo y que pases una buena semana.
ResponderEliminarPreciosa la historia, y que bonita sonrisa te dedico.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo
Podría darme envidia, la magnifica foto que has conseguido, es esplendida. Pero no, me da envidia y mucha esas historias que cuentas y que son momentos tan especiales con otro ser humano.
ResponderEliminarEnhorabuena Ignacio por las dos, y espero sigas viviendo grandes momentos y compartiendo los que te parezca.
Un beso
PD. Gracias por pasarte y decirme.......Tienes razón, están mejor abiertos y no hay que agobiarse...........
La foto es preciosa, la sonrisa y la luz de los ojos llenan toda la imagen. Está claro que bien se merecía la foto y que todos se llevaran de recuerdo los collares y, por su puesto, una gran y tierna historia...
ResponderEliminar¡Abrazos!
Preciosa foto. La historia, mejor no la hubieras podido contar, porqué la niña estuviese en la escuela, pero la vida es así de injusta.
ResponderEliminarPreciosa historia y fantástico retrato. Un abrazo.
ResponderEliminarGuapa...
ResponderEliminarSensacional historia...
Esta son las cosas que llenan...
Lujazo y enorme fotografía.
Por esta cosas, te llamo "maestro".
Un abrazo crack
Joe...y tanto Ignacio..y tanto...hay momentos únicos, que en la moviola de nuestra vida aparecen...éste sin duda será uno...y quedará en la retina de muchos, los que lo vivieron y la de los que podemos disfrutar de ello gracias a tu fotografía...que por cierto tiene una fuerza inmensa...es un auténtico FOTÓN...ES MÁGICA... muy MÁGICA...
ResponderEliminarFELICIDADES MUCHACHITO...HAZLE LLEGAR LA FOTO ( TODO ES POSIBLE :-))
ABRAZOTES y buena semanita...yo ya casi de vacacionesssssssss...no me lo creooooooooooooo :-)
Noemí Padrón
Supongo que es precisamente por esto por lo que salimos por el mundo a tomar fotografías.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
ResponderEliminarHoy hace un día horrible, estoy tirada en la cama y no sé cómo llegué a tu blog pero me puse a verlo, entonces llegué a esta entrada…¡Es hermosa en su conjunto!
Amé la foto, creo que pocas veces te volverán a sonreír así. Y amé la historia, y que te ganara porque sino no tendríamos esa expresión irrepetible.
Un abrazo.
Muchas gracias por tus palabras, mi anónima amiga!!!
EliminarEs una gran satisfacción saber que mis fotografías te han ayudado a pasar ese "día horrible", jajajaaaa!!!
Un gran abrazo y, de nuevo, mil gracias...ojalá supiese tu nombre!!! ;)